¿Qué se investiga en el caso de los mellizos africanos que habían sido adoptados?

En las últimas horas y tras un mega operativo llevado adelante por agentes de la División Unidad Operativa Federal San Martín de los Andes, se demoró al matrimonio acusado por el abandono de dos menores de República de Guinea-Bissau (África), que habían adoptado en 2019. Un caso que generó dolor e indignación al conocerse, allá por noviembre de 2020.

La pareja, que vive en nuestra ciudad desde hace más de dos años, ahora se encontraba domiciliada en un barrio privado. La Justicia por estas horas investiga de qué manera se llevó a cabo la adopción y si hubo algún delito en torno al trámite. Fue por eso que desde el Juzgado Federal de Zapala, a cargo de la Dra. María Silvina Domínguez, donde se investigan estos hechos se solicitó la diligencia judicial.

Durante el allanamiento del inmueble, realizado junto a personal de la Dirección General de Migraciones,más la presencia de testigos, se secuestró documentación relacionada con la causa, como los certificados de la adopción realizada en la República de Guinea-Bissau en 2019, pasajes de avión, fotografías de los menores, certificaciones y presentaciones judiciales.

El matrimonio, junto a los elementos secuestrados, quedaron a disposición del magistrado interventor por infracción a la ley sobre el régimen legal de migraciones. Luego de las notificaciones correspondientes, el juzgado resolvió dejarlos en libertad.

El caso

El abandono de los mellizos africanos ocurrió el martes 17 de noviembre de 2020, pero fue dado conocer seis días después. Después de haber compartido casi un año y medio junto al matrimonio y su hija biológica de 11 años. Eduardo Rucci se dirigió hasta la Comisaría de la Mujer y la Familia de Bahía Blanca, de donde es oriundo, para solicitar que algún organismo provincial de la niñez se hiciera cargo de los niños.

Un año antes, en 2019, el matrimonio había viajado a República de Guinea-Bissau (África) con los trámites iniciados en aquel país para la plena adopción de los chicos, tras llevar varios meses de contactos por videollamadas periódicas para generar el vínculo de familiaridad.