Violencia obstétrica: un debate sobre el parto respetado
Este sábado, desde las 15 hs, en la plaza San Martín, estará emplazada una carpa abierta a la comunidad, en la que se desarrollarán charlas y debates en el marco de la Semana Mundial del Parto Respetado. Hilen Moreno, Lic. en obstetricia, que desarrolla su labor en el Hospital Ramón Carrillo, analizó el presente local en cuanto a la aplicación de prácticas obstétricas, los principales pilares de trabajo y lo que aún queda por mejorar.
Desde el pasado martes 16 se vienen llevando a cabo diversas acciones de concientización, debate y reflexión en torno a las prácticas obstétricas hospitalarias, bajo el lema “Salud es parir libres de violencia”. Una de ellas implicó la instalación de un buzón abierto para acercar historias, sugerencias y experiencias, que se encuentra dentro del hospital de nuestra ciudad, en el ala A de obstetricia. Además, se desarrollaron charlas y talleres dirigidos al personal de salud.
“La idea es que puedan participar todos, tanto la comunidad como el personal hospitalario, de forma anónima, que es cuando mejor nos animamos a decir lo que nos pasa o lo que nos genera dudas; contar lo que les gustaría cambiar; compartir experiencias. Podemos aprender mucho de esos relatos, para seguir repensando y modificando los paradigmas de atención. Necesitamos cambiar, repensar algunas cosas, y para eso necesitamos que participen y se expresen”, explicó la Lic. Moreno, en comunicación con RSM Radio.
Sobre las prácticas de atención en San Martín de los Andes, expresó: “Cuando llegué a la ciudad me encontré con que acá estaban atendiendo con un paradigma bastante nuevo, en comparación a otros lugares del país. Los niveles de violencia obstétrica, que se veían tan fríamente en otros hospitales, acá los vi muy bien, con un sistema avanzado, igual que en Chos Malal. Me sorprendió muchísimo cómo venían trabajando en el marco de la ley del parto humanizado”.
En lo que va del año, ya se han atendido 150 partos, con una tasa de cesárea de aproximadamente un 30%. “Hay una alta tasa de natalidad. Tenemos dos salas de atención, espaciosas, cómodas y privadas, con camas que se acomodan con muchas posiciones y accesorios, para acompañar las posturas de parto de cada persona. Más allá de la vía de nacimiento (por cesárea o parto vaginal), todos deberían tener las mismas posibilidades de atención. Siento que donde más tenemos que trabajar es en la práctica de cesáreas, que son más complicadas y que involucran más personal. Hay que lograr un paradigma de atención nuevo respecto a esto, en el que se puedan lograr las mismas condiciones acogedoras y empáticas que se brindan en el caso de los partos vaginales, asegurando el contacto piel con piel que es tan importante”, contó la profesional.


Durante la semana, se desarrollaron talleres y reuniones para trabajar los miedos, dudas y mitos sobre el parto: “La idea es poder sacarnos esa mochila que no son nuestras, miedos que no nos pertenecen, y llegar más livianos y con más confianza al momento de parir: confianza en nuestro cuerpo, en nuestro bebé que nos eligió para nacer, y que sabe bastante, entonces creo que hay que aprender también a confiar en ellos. La idea de esta semana es poder compartir el sábado, en la plaza, circular la palabra y charlar entre todos, específicamente sobre violencia obstétrica, que es lo que nos convoca, pero también de todos los temas que necesiten”, invitó.
Otro tema importante para combatir la violencia obstétrica es informarse en materia de derechos y obligaciones, para que al momento de llegar al parto se lleven adelante las prácticas tal como cada mujer lo expresa: “Hay que tener en claro qué cosas pueden pasar, qué cosas no quieren que sucedan y cuáles, de ninguna manera pueden ocurrir. Conocer la ley y los derechos que nos amparan como mujeres embarazadas nos permite interpretar cuando hay algo que está por fuera de lo esperable. El momento del parto no es el momento de discutir, pelear o exigir. La expresión de los deseos es previa. Y llegado el momento, es trabajo del acompañante ser la voz de esa mujer para solicitar las cosas por ella. De todas formas, nada de esto debería pasar, porque tendríamos que estar en un lugar tranquilo y cuidado en donde sintamos que nos están respetando”, explicó Moreno.
Hace poco, el hospital absorbió la demanda de atención de la Clínica Chapelco, tras el cierre de su servicio de maternidad: “La gente estaba muy angustiada y se trató de contenerlos lo mejor posible. Tenemos una agenda gigante de demanda, pero se pudo ir llevando bien la atención de todas las madres, que ya estaban muy próximas al parto”, informó.
Las actividades, en el marco de la semana del parto respetado, y bajo el lema “Salud es parir libres de violencia”, se continúan esta tarde, de 15 a 17 hs, en la plaza San Martín, donde va a estar la carpa de Punto Saludable y se estará llevando a cabo una ronda de debate e información, para visibilizar la problemática de la violencia obstétrica y trabajar para erradicarla.
fotos: Leo Casanova.
Deja un comentario